La industria de la criptografía no ha estado exenta de estafas y contras. Bitcoin ha luchado contra esta reputación desde su inicio y los principales medios de comunicación alimentados por la propagación de noticias negativas no ayudan en nada. Las redes sociales y los gigantes de la búsqueda son igualmente culpables, pero eso no detiene el ataque de BTC.
Los investigadores han descubierto que la mayoría de los enlaces devueltos en las páginas de búsqueda de Google, para generadores de códigos QR de Bitcoin, son para sitios web falsos o fraudulentos.
Forbes, en su postura habitual de ataque a Bitcoin, informó que es solo otra estafa de cifrado que ha impedido la adopción.
Lo que debería haber informado es que, en primer lugar, es una estafa de Google por permitir estos enlaces fraudulentos en su motor de búsqueda. El estudio informó que 4 de los primeros 5 resultados, presentados al consultar Google, conducían al sitio web del estafador.
Según los investigadores del proveedor de criptomonedas ZenGo, los códigos QR generados a partir de uno de estos sitios web falsos enviarán el Bitcoin a la dirección de los estafadores.
Los códigos QR se utilizan para capturar los datos mediante cámaras de teléfonos móviles, en este caso para compartir rápidamente una dirección de Bitcoin.
“Estos sitios generan un código QR que codifica una dirección controlada por los estafadores, en lugar de la solicitada por el usuario, dirigiendo así todos los pagos de este código QR a los estafadores. Los estafadores ni siquiera se molestan en generar su QR falso ellos mismos, sino que llaman descaradamente a una API de blockchain explorer para generar el QR para su dirección», agregaron los investigadores.
Se ha estimado que se han perdido alrededor de US$ 20.000 por estafas de códigos QR, sin embargo, esa cifra podría ser mucho mayor.
Al igual que el malware copiar/pegar que infectó computadoras hace un par de años para alterar las direcciones de Bitcoin, esta estafa es una versión más rápida. Habrá otros y la información errónea de que está «fomentando la percepción pública negativa sobre bitcoin y la criptomoneda» es puro propagación de informaciones maliciosas. Internet está inundado de estafas, pero mira cómo ha ido la adopción de eso.
La conclusión es el sentido común aquí, no se puede confiar en los resultados de búsqueda de Google, y tampoco se puede publicar nada en Facebook. Ambos gigantes tecnológicos de Estados Unidos han sido los mayores diseminadores de estafas y sitios falsos, la mayoría de los cuales le han dado a la industria de la criptografía su mal nombre.
Por supuesto, hay malos actores, pero no necesitamos grandes monopolios web que los transmitan mientras aprovechamos nuestros datos personales y hábitos de búsqueda. Mantente a salvo allí afuera.